La aquilea (Achillea millefolium), también llamada milenrama, es muy popular por la multitud de sus beneficios, especialmente contra diversos trastornos menstruales y menopáusicos. Además, no se han descrito contraindicaciones. A continuación, se explican detalladamente sus beneficios y las formas de tomarla.

Gracias a sus aceites esenciales (camazuleno, alcanfor y linalol) y diversas sustancias como flavonoides, lactonas sesquiterpénicas, aquileína, betaína y taninos, resulta útil en los siguientes casos.

Por ejemplo, espasmos intestinales, náuseas y vómitos. Como estimula la bilis y los jugos gástricos, también resulta útil para aumentar el apetito.

Evita la inflamación del hígado y la vesícula y favorece la eliminación de los cálculos biliares y renales. Como es viricida, también puede ayudar en el tratamiento contra la hepatitis B.

Regula las menstruaciones, es estrogénica (favorece la producción de estrógenos) y ayuda contra la amenorrea, es decir, favorece el periodo en mujeres que no lo tienen. Pero, además, evita los periodos demasiado abundantes y calma los dolores de la menstruación gracias a su efecto antiinflamatorio y contra los calambres abdominales.

En cuanto a los problemas vaginales, se usa para evitar la leucorrea. Además, es útil para tratar las alteraciones de la menopausia.

Gracias a sus propiedades a favor de la circulación sanguínea, resulta útil contra tales trastornos. Al mismo tiempo, reduce la presión arterial y disminuye ligeramente la glucosa.

Aplicándola externamente, es útil para acelerar la curación de heridas en general, llagas y aftas bucales.

Esta planta es diurética, estimula la circulación y es tonificante. En general, resulta útil como tonificante cuando una persona se siente cansada. Recomendado también para calambres.